Estamos atravesando sin dudas uno de los eventos de salud más desafiantes. La pandemia y su impacto impusieron la demanda de vacunas más grande de la historia.

Luego de haber esperado durante todo 2020 el desarrollo de la vacuna y habiéndose logrado en tiempo récord, ahora los gobiernos y entidades de salud tienen el desafío de ser asertivos en su logística y distribución para procurar la seguridad de las personas que la reciban. La decisión sobre su distribución y el aseguramiento de sus condiciones de conservación y temperatura es tan importante como lo ha sido el advenimiento de la vacuna. En este nuevo reto, la serialización y trazabilidad son fundamentales.

Tom Woods, Presidente del Comité Directivo Mundial para el Aseguramiento de la Calidad de los Productos Sanitarios, comentó en una nota publicada en el blog del banco mundial “Nada socavaría más rápidamente la distribución de vacunas y tratamientos eficaces contra la COVID-19 (coronavirus) que la aparición de vacunas falsas” y “El posible desvío de estos bienes altamente valorados en detrimento de los receptores prioritarios o desatendidos también sería trágico”. En otra publicación, un informe técnico de Deloitte “Securing Trust in the Global COVID-19 Supply Chain,” se señala la imperiosa necesidad de, con el objetivo de asegurar la confianza pública, impulsar la colaboración de la industria en toda la cadena de valor, adoptar y promover estándares globales para la seguridad de la cadena de suministro, anticipar los desafíos para la entrega segura y eficaz de vacunas, y utilizar comunicaciones claras y transparentes para la confianza de las vacunas.

Muchos países y regiones que cuentan con regulaciones sobre el tema, y en donde Verifarma tiene operación ya han avanzado con medidas para poder asegurar la serialización y trazabilidad de las vacunas Covid-19 con el objetivo de asegurar la integridad de la cadena de suministros. Tal es el caso de la Unión Europea, Rusia, entre otros. En Latinoamérica particularmente, la serialización y trazabilidad están avanzando sobre los países Brasil y Ecuador. Por su parte, Paraguay, Colombia y México han estado revisando el tema. En otros países, sin embargo, incluso en donde la serialización y trazabilidad ya se encuentran regulados con ciertos años de antigüedad, aún esta decisión no se ha avanzado para las vacunas de Covid-19.

Argentina por su parte fue el segundo país del mundo en implementar un sistema de trazabilidad luego de Turquía, al sacar su regulación en 2011. De esta manera, el SISTEMA NACIONAL DE TRAZABILIDAD DE MEDICAMENTOS (SNT), cuenta en la actualidad con 10 años de experiencia y se encuentra más que listo para incorporar el reporte la presente vacuna de manera de poder enmarcarla dentro de un proceso que asegure la calidad y originalidad del producto, y genere eficiencia en la entrega.

Estamos a nivel mundial encarando el segundo gran reto luego de la aparición de la vacuna: optimizar la cadena de distribución para asegurar la calidad y condiciones, y poder cerrar el proceso de una manera eficiente. Afortunadamente existe hoy tecnología y experiencia en marcos regulatorios para poder avanzar sobre este punto que resulta de urgencia.

Por Santiago Spector, CEO Verifarma.